lunes, 8 de diciembre de 2008

De catas junto al Mediterráneo y las dehesas


Siempre que tengo ocasión y la agenda me lo permite me gusta ‘saltar a la arena’, por utilizar un símil taurino, y tener contacto directo con el consumidor final para, además de los comentarios de los distribuidores con los que tratamos habitualmente, conocer la opinión real que tienen de nuestros vinos.

Hace unos días me acerqué hasta Valencia para dar una cata en Entrevins (C/ Reina Doña María, 3. Tfno: 963 333 523), un restaurante vinoteca que dirige el amigo Guilleaume. Como buen burgalés, he de confesar que al llegar me emocioné al ver la estatua del Cid, que pone de manifiesto los vínculos entre nuestras tierras, y de algún modo me sentí como ‘El Campeador’ camino de conquistar la capital del Turia.

Siempre que voy a Levante me cautiva la calidez de su gente y me sorprende lo mucho que saben de vinos. Una cualidad que quedó patente entre el grupo de 30 personas que se dio cita en Entrevins, habituales de las cenas maridaje que organiza todos los jueves. La bodega ya la habían descubierto con anterioridad a través de unas botellas magnum que descorcharon en “una cena memorable” y eso les llevó a invitarme, curiosos por conocer más de nuestros vinos.

Guilleaume preparó un original menú para degustar con un amplia gama de Martín Berdugo y demostró que la cocina Mediterránea, incluidas propuestas más arriesgadas como las sardinas o el atún, casa a la perfección con nuestros vinos. Aunque, sin duda, el plato de mayor éxito fueron las perdices con chocolate que acompañaron a nuestro crianza.

Además de reveladora –se demostró que no hay que catar con prejuicios- la experiencia resultó muy divertida porque al final, después de mucho hablar de vinos y de probarlos, rematamos con una de las especialidades de la casa: unos espectaculares gin tonics y aquello acabó convertido en una fiesta.

Unos días después, me planté en Celler Can Pujol (C/ Duc de la Victòria, 9. Tfnos: 938 93 74 36 / 938 93 15 35), una bodega, tienda y restaurante de Vilanova i la Geltrú (Barcelona), que regenta Montse, donde, al igual que en Valencia, sus clientes tuvieron la oportunidad de disfrutar de nuestros verdejo, joven, barrica, crianza y MB, en esta ocasión maridados con cocina catalana de corte más tradicional.

Desde el primer momento se creó un ambiente muy agradable, la gente se mostró muy participativa y creo que conseguí la esencia de lo que pretendía transmitir, que no es otra cosa que hacer el mundo del vino más cercano a la gente. La verdad es que no se cortaron ni media, estableciéndose un disputado debate, como en el caso del barrica donde, alguno que no está acostumbrado a los riberas y pese a que nosotros hacemos unos vinos menos tánicos de lo que se estila en la DO, se sinceró asegurando que “rasca de cojones” -, mientras para otros estaba delicioso. Mi consejo fue que lo que tienen que hacer es ir probando diferentes cosas y al final establecer su propio criterio.

Apenas sin deshacer la maleta, dos días después viaje hasta Badajoz donde con motivo del décimo aniversario de La Vinatería (C/ Martín Casado, 9. Tfno: 924 26 23 11), un establecimiento con un amplia carta de vinos, donde se pueden realizar catas y a cuyo frente están María y Juan, los Martín Berdugo fueron protagonistas dejando el pabellón muy alto en una cata degustación junto a caldos de Vinícola Guadiana-Vigua (D.O. Ribera del Guadiana), Bodegas Luis Cañas (DOC Rioja) y la Compañía de Vinos Telmo Rodríguez (Varias D.O.).

Bueno, lo siento pero tengo que cortar. Me voy rápido a tomar un avión hacia Corea. En Seul me espera Simon, nuestro importador. Os mantendré informados de mi periplo asiático.
Every time I can, I like to participate in tastings and learn from our consumer’s opinions.

Two weeks ago I was invited to a dinner-tasting at Entrevins, a restaurant in Valencia Managed by Guilleaume. Guilleaume prepared an original menu to be tasted with our wines, leaving Berdugo Crianza as the ideal match for quails with chocolate.

Some days after the tasting took place in Vilanova a restaurant in Barcelona though this time our wines were matched with traditional Catalonian cuisine.

You can feel a great atmosphere, in this type of events, from the beginning everybody participates from those not very acquaintance with the appellation Ribera del Duero to those who have made Ribera del Duero their favourite Appellation.

I’m afraid I’ll have to leave it at that as I have to go visit Simon our Korean importer.

2 comentarios:

tia cookie's dijo...

Hola Martín, pasaba por vuestra web y he visto el blog. Debo decirte que mi relación con el mundo del vino, se resume a que soy hija de un riojano amante de los buenos caldos. Aprendí algo de mi padre al que perdí, desgraciadamente, demasiado pronto. Afincada en Barcelona y ya como profesional del periodismo he podido conocer un poquito más el mundo del vino catalán, pero sigo siendo una aficionada.
Me gusta, y por eso te escribo, la estrategia de comunicación de tu bodega. Ánimo con el blog y las iniciativas de micro-relatos! Buenas fiestas y buenos vinos, Salud!

Anónimo dijo...

Saludos.
Le escribo para hacerle efectiva la invitación a mi blog.
En él inserto un artículo en el que advierto a todos los que quieran leerlo lo que me ocurrió con el Santander Central Hispano. Yo caí… hasta cierto punto, en el engaño. Pero al menos mi experiencia valdrá para que otros no sigan mi camino.
La verdad, nunca aguanté la mentira.
Sobra decir que siempre que lo desee será bien recibido por mi humilde espacio virtual.
Un abrazo desde Gran Canaria.